Todo cambia, evoluciona, solo los fuertes y poderosos sobreviven y los que se quedan atrás se olvidan, ni siquiera forman parte de la historia. Esto ocurre ahora mismo con las nuevas tecnologías. Con la implantación de Internet y la gran aceptación que ha tenido en la sociedad la prensa ha tenido que evolucionar, ha vivido su propio darwinismo.
La prensa decidió sumarse a las nuevas tecnologías y empezó a crear sus propios diarios electrónicos. En un principio no eran más que copias de las noticias publicadas en papel, a penas se actualizaban, se temía por la pérdida de la exclusiva. Más tarde comenzaron a crear contenidos propios aunque el volcado de noticias, desafortunadamente, no ha cesado.
Eva Domínquez, en su artículo “Dudas y certezas de la industria de medios online” plantea esta cuestión. La autora asegura que los medios han de adaptarse al nuevo escenario de Internet.
Esto es lo que ocurre, por ejemplo, en los diarios españoles. Después de crear contenidos propios se sumaron a la moda de los “blogs”, al periodismo de servicio e incluso, los más valientes se adentraron en el inexplorado campo del periodismo ciudadano, como es el caso de Bottup.
No tenemos la certeza de saber qué ocurrirá en el futuro, si la prensa se extinguirá o seguirá siendo un medio de masas pero, lo que está claro, es que hay que renovarse o morir. Ésta es la ley del más fuerte, del sálvese quien pueda
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